Un Grito de Corazón

Ramos Mejía LTC se quedó con el Súper 8 tras derrotar a Ferro 78 a 66 en una final histórica. Con garra, carácter y efectividad, el Rancho dio vuelta un partido adverso y gritó campeón en el Microestadio de River. "Manute" Montero fue elegido MVP de las finales, tras su gran actuación.

La alegría y euforia brotaron al parquet del Microestadio de River. Faltaban segundos para que se termine el partido final y Ramos ya festejaba. El banco de suplentes se unió en un abrazo generalizado y los jugadores empezaron a levantar los brazos hacia la tribuna donde estaban los hinchas del Rancho. Pitazo anticipado de Roberto Smith y la invasión de cancha característica. Todos a abrazarse con todos. Llantos, gritos, felicidad, locura. Bengalas, humo, vuelta olímpica, fotos, copas, medallas, corte de red, festejos eternos. Sí, el sueño se había cumplido. Ramos Mejía es el campeón del Súper 8 y jugará una instancia nacional el próximo año.

La lluviosa noche porteña nos regalaba al menos una final apasionante. Ferro, obligado a ganar tras el flojo primer juego debía mejorar sus númeroa si no quería irse a casa con las manos vacías. Ramos llegaba entonado y con ganas de terminar la serie en ese instante. Se dio un arranque con sorpresas porque el Verde (vestido de negro) tomó la posta con Nicolás González, indetenible. El escolta fue una pesadilla para Ramos y encestó 12 puntos en el primer cuarto. Ferro se adelantaba 18 a 11, con gran efectividad de tres puntos (4/7).

Los dirigidos por Patricio Neilan no le encontraban la vuelta al juego y estaban erráticos. A Ferro, en cambio, se lo notaba más certero y seguro. Fue tan así que los de Pedro Fernández sacaron la máxima de 26 a 18 con un triple de Pablo Israeloff y Mariano Travnik. Sin embargo, en su peor momento, Ramos salió adelante mejorando en su defensa y con un bombazo de Miguel Ricci y ocho puntos consecutivos de Javier Montero, emparejó el partido e hizo negocio para irse al descanso 26 a 32.

En el tercer cuarto, Ramos cambió de actitud, fue más agresivo en defensa y mejoró sus números. Un parcial tempranero de 7-2, con cinco tantos de Miguel Ricci, le dio oxígeno al Rancho. Pero minutos más tarde Ramos se escaparía 47 a 36, sacando la máxima. A esa altura eran más que valorables los aportes de Facundo Lapadula a distancia, Javier Montero en el poste bajo e Ignacio Alzaga con sus rompimientos. Ferro no pudo mantener ese arranque pero lejos estuvo de darse por muerto. Sobre el cierre, con Diego Abeledo y Hernán Tettamanti a la cabeza, los de Caballito corrieron 7 a 1 y cerraron el cuarto 51-55.

Quedaban los últimos diez minutos para que se defina la historia. Ramos picó en punta con un parcial de 9-2 (60-53) en dos minutos y fracción. Con una defensa a presión y buenos cotragolpes, el equipo vestido de blanco y rojo fue superando al rival en juego y en resistencia. Ferro ya no corría bien la cancha, era desorganizado y estaba desgastado. Eso lo aprovechó el Lawn Tennis que llegaba fácil al gol. Martín Zekas, con 10 puntos en el período, se alzaba como figura determinante. No quedaba mucho en juego y Ramos mantenía la diferencia (67-58) con inteligencia. A pesar de la garra de Abeledo y los intentos de Cortese e Israeloff, Ferro no podía quebrantar a un Ramos sólido y seguro, que corría permanentemente. Miguel Ricci (21) y Javier Montero (25) se cansaron de anotar y llevar adelante a su equipo.

Ya todo estaba dicho. La tribuna empezaba a gritar por el campeón. Los jugadores lo sabían. Todos lo sabían. A Ramos Mejía ya nadie le podía sacar el merecido título. Solo había que esperar la bocina final del tablero electrónico, que a esa altura marcaba el 78 a 66 irremontable. Ramos fue una fiesta. Color y calor de su público hacia los protagonistas directos de este logro histórico para la institución del Oeste.
Salud campeones!

Síntesis:

Ramos Mejía LTC (78): I. Alzaga 8, M. Ricci 21, F. Lapadula 6, A. Billone 4 y J. Montero 25 (f.i.); M. Zekas 12, E. Ziegler, F. Pavón y E. Szewzcuk 2. DT: Patricio Neilan.

Ferro Carril Oeste (66): D. Clavell 5, N. González 12, P. Israeloff 11, D. Abeledo (x) 14 y G. Sapochnik 2 (f.i.); M. Travnik 6, H. Tettamanti 5, E. Camejo, S. Cortese 8 y N. Díaz. DT: Pedro Fernández.

Parciales: 11-18 / 26-32 (17-14) / 55-51 (29-19) / 78-66 (23-15)

Árbitros: Daniel Rodrigo - Diego Rougier - Roberto Smith

Estadio: River Plate