A la final, con un sueño a cuestas

Ramos Mejía se llevó una serie emocionante de semifinales ante Tres de Febrero y alcanzó la final del Súper. Hubo actuaciones sobresalientes de Facundo Pavón y Martín Zekas. El próximo lunes en el Microestadio de River es la definición ante Ferro.

Ramos Mejía volvió a vestirse de fiesta. No faltaba nadie en el Rancho para presenciar un encuentro de semifinales de alto voltaje. La serie ante Tres de Febrero resultó ser tan desgastante para ambos como apasionante y pareja. Un juego por bando obligaba la forzada definición. Y claro, nadie se lo quería perder, por eso el gimnasio de la calle Echeverría desbordó de público como nunca.

La tensión de las gradas rápidamente fue absorvida por los jugadores. Luego de que Diego Rougier lanzara el balón al aire, Ramos empezó mejor con un parcial fugaz de 6 a 0 con un doble de Ariel Billone y dos conversiones de Miguel Ricci. Pero la visita reaccionó a puro triple para pasar al frente y dominar. Fueron tres bombazos de parte de Martín Baptista y Nicolás Tomaro, la gran figura del primer cuarto. Así, Tres de Febrero se imponía 18 a 12 e incomodaba al local.

Ramos recuperó la memoria en el segundo cuarto para poner las cosas en su lugar. Buenos pasajes de "Manute" Montero, con dos triples y un ingreso de Martín Zekas (7 puntos) más que auspicioso, le devolvía el color a la repleta tribuna local. El Rancho había volcado su mejor versión en el período y le sumaba gritos a distancia con la mano caliente de Facundo Pavón (dos triples). Fue 25 a 12 el parcial a favor del equipo de Patricio Neilan, mientras que los hombres de Javier Maretto no podían aprovechar a sus figuras internas (Sevegnani y Miranda) y el único sostén era Tomaro con su tremenda efectividad.

Ramos se había ido al descanso largo 37 a 30 a su favor. El juego creció en intensidad y se tornó más físico que al comienzo. Ya no era tan lucido como los anteriores, pero obviamente nadie quería perder. Algunas estocadas de Ricci y un triple oportunísimo de Pavón sostenían el marcador en favor del Lawn Tennis. Sin embargo el Trede no bajaba la guardia y siguió lastimando con el intratable Tomaro en ofensiva, a lo que se sumó el aporte de Sebastián Sevegnani.

Los minutos finales tuvieron siempre al frente a Ramos, pero en hasta el cierre se mantuvo el suspenso porque delante había un rival duro, que si bien había bajado la intesidad en ataque, su principal arma eran los triples y podían ser fundamentales. La amnesia ofensiva del local provocó el nerviosismo de su público, pero afortunadamente pudo balancear esa ineficiencia con una defensa exigente y el tablero controlado. El buen manejo en la base -pese a la presión- de Facu Pavón y Emilio Ziegler posibilitó regular el tiempo de posesión y quemar minutos en el tablero. Martín Zekas cerró una gran planilla con algunos dobles cerca del cesto y Emilio Ziegler cerró la serie desde la línea de libres.

Tres de Febrero dejó todo hasta la útima bola y eso quedó reflejado en el marcador y el desarrollo del juego. La desazón invadió a sus numerosos hinchas, que igualmente reconocieron el esfuerzo de sus jugadores.

La alegría, sin lugar a dudas estuvo en el otro costado y fue de Ramos. Los festejos se multiplicaron entre jugadores, dirigentes e hinchas que se mezclaban en el parquet. Un merecido triunfo para disfrutar que significa nada más ni nada menos que alcanzar la final por un ascenso. Será ante Ferro, el lunes en el Microestadio de River. La ilusión y el sueño viajarán al barrio de Núñez para tratar de conseguir el anhelo máximo.

Síntesis:

Ramos Mejía LTC (63): I. Alzaga (x) 6, M. Ricci (x) 9, F. Lapadula 2, J. Montero 8 y A. Billone 4 (f.i.); F. Pavón 12, E. Ziegler 7, M. Zekas 15 y E. Szewczuk. DT: Patricio Neilan.

Tres de Febrero (56): N. Tomaro 28, M. Baptista 13, D. Baptista 3, S. Sevegnani 11 y L. Miranda 1 (f.i.); P. Zaldo, L. Zaldo, N. Petris. DT: Javier Maretto.

Parciales: 12-18 / 37-30 (25-12) / 50-42 (13-12) / 63-56 (13-14)

Árbitros: D. Rougier - R. Castillo - F. Sampietro