Una ráfaga verdinegra dejó a Ramos sin nada

Ramos Mejía no pudo en casa ante un implacable Villa Mitre y cayó 80 a 73 por la segunda fecha de la Liga Metropolitana. El conjunto de La Paternal sacó la diferencia necesaria en la primera mitad y luego reguló. En Ramos, lo mejor fue la tarea de Emilio Ziegler, con 21 tantos.

Luego de la trabajada victoria ante Pinocho en Villa Urquiza, Ramos Mejía recibía a una de las sorpresas de esta flamante Liga Metropolitana, el club Villa Mitre, quien había vencido a River en Núñez.

Villa Mitre, otra vez visitante, ratificó esa condición de verdugo y demostró en los primeros veinte minutos que será un equipo durísimo si anda derecho con el aro. La mano comenzó mal para Ramos. El equipo de Patricio Neilan se mostró muy errático en sus lanzamientos (1/8 en triples). "Manute" Montero no convertía sus tiros habituales y tanto Miguel Ricci como Javier Svoboda no podían quebrar la defensa visitante.

Justamente Villa Mitre fue el que empezó a lastimar con sus tiros de tres puntos. Masareli calentó la muñeca y metió dos bombas. Además, el trabajo interno de Anegón y Fabris, quienes no sólo anotaban cerca del aro, sino que también mostraban una gran tarea defensiva para anular a Montero y a Heffes.

Ramos estaba perdido en la cancha y en un rápido pasaje en el segundo cuarto, Villa Mitre se colocó 33 a 15 arriba en el marcador, enmudeciendo al público local. La visita era una tromba en ataque y con el ingreso de Castro siguió convirtiendo triples. Por el lado del Rancho, Manute Montero se cargaba de faltas y debía salir; Emilio Ziegler atacaba el aro buscando el descuento, pero la defensa de Mitre estaba bien plantada y el aro hacía rebotar cada tiro. El elenco de Federico Carbone se fue al descanso 47 a 29 y parecía partido liquidado.

En la segunda mitad, Ramos pareció reaccionar buscando de cualquier manera convertir. Claro que no fue tarea senciila. El aro seguía siendo el enemigo número uno y el orden y la tranquilidad de Villa Mitre para jugar cada ofensiva ponía cada vez más nerviosos a los hinchas y jugadores loales, que veían que el tiempo pasaba y la diferencia seguía estancada a favor de los visitantes (57-39).

En el último cuarto, Ramos salió a matar o morir y rápidamente metió un parcial de 11 a 3, apoyándose en Leonardo Heffes y Emilio Ziegler, que atacaba permanentemente el cesto. La historia comenzaba a inclinarse a favor del local, que ejercía una presión de toda la cancha para tratar de robar balones y correr. Villa Mitre había bajado su goleo, pero su áspera defensa se mantenía atenta para aguantar el triunfo.

El momento de más dramatismo llegó a falta de un minuto y monedas, cuando Ramos se puso a cinco (70-75) gracias a un triple de Pablo Israeloff. Si bien no quedaba mucho en juego, el margen se había achicado y algunas esperanzas remotas quedaban. Sin embargo, Villa Mitre iba a tener la tranquilidad de asegurar el partido desde la línea de libres. Su base y líder, Cortegozo, metió todos los lanzamientos libres que ejecutó en los últimos instantes y aseguró el partido.

Ramos se quedó con la bronca de haber jugado un muy mal primer tiempo en el que Villa Mitre lo arrasó a puro goleo. Lo cierto es que en La Paternal la alegría es de Mitre, un equipo sin figuras rutilantes que con orden y un rendimiento parejo en sus jugadores ya le ganó a dos candidatos como visitante y mandó un mensaje.

El "Rancho" tiene tiempo para remendar algunos errores, ya que el torneo recién empieza, al igual que la ilusión.

Síntesis

Ramos Mejía LTC (73): Ziegler (x) 21, Svoboda 4, Ricci 9, Montero (x) 9 y Heffes 14 (f.i.); Miranda 0, Israeloff 11 y Pavón 5. DT: P. Neilan.

Villa Mitre (80): Cortegozo 14, Masareli 13, S. Alvarez 7, Anegón (x) 13 y Fabris 13 (f.i.); Castro 10, Petris 4, G. Alvarez 6 y Martinez 0. DT: F. Carbone.

Parciales: 13-19 / 24-47 / 39-57

Árbitros: Rodrigo y Aguilar