Con 18 años, el Japo está haciendo sus primeras armas en Primera y de a poco va sumando experiencia. El clásico con Porteño, su historia y su rol como profesor de los más chicos. Esta noche, a las 21.30, Ramos juega ante Estudiantil por el torneo de conferencias.
Facundo Kaneshiro es uno de los jugadores surgidos del semillero de Ramos que mayor proyección tiene. Con tan sólo 18 años, el Japo se lució ante Argentino de Castelar en la Primera y forma parte del plantel del Prefederal.
-¿Qué sentiste en tu partido debut en Primera en esta temporada como local?
-Me sentí muy a gusto en la cancha y con mis compañeros, fue una linda experiencia porque estar acá desde los cuatro años, desde chiquito. Era Mini y venía a ver a los jugadores de Primera y ahora que me toque a mi estar del otro lado, vistiendo los colores de Ramos es todo un orgullo, y que me haya ido bien para mí es una gran felicidad.
-Ante Argentino de Castelar, además de ser la figura, hiciste una jugada muy especial que se comentó en las tribunas, incluso por los hinchas rivales. ¿Cómo fue ese momento?
-Fue muy lindo, sentí que estaba haciendo una buena jugada. Se escuchaba un murmullo en la tribuna y ver que me salió bien es muy lindo la verdad. Se sintió muy bien.
-¿Cómo llegaste al club, cómo fueron tus comienzos y tus primeros pasos en el básquet?
-Bueno, yo venía al jardín acá al lado y hacía natación desde chiquito acá en el club. Un día con mi abuelo, que siempre me pasaba a buscar, subimos al gimnasio de básquet. El jugaba al básquet y también jugó al fútbol profesionalmente, y me dijo si quería probar. Le dije que sí, y desde los cuatro años que se convirtió en mi vida, el básquet es todo. Y así, gracias a mi abuelo empecé a jugar al básquet.
Kaneshiro, además de jugar en la categoría U19, entrena con la Primera División desde el año pasado, cuando era cadete (U17) de segundo año.
-¿Cómo te sentís en los entrenamientos?
-La verdad que me siento muy cómodo. Los jugadores de Primera siempre intentan ayudar a los más chiquitos, a los que son de inferiores intentan dar una mano. Hay cosas que te las da la experiencia y capaz vos no la tenés y que te ayuden está muy bueno. Los entrenadores nos están dando mucha confianza a los jugadores chicos, porque nosotros al tener un plantel muy bajo de edad, promedio 20 -21 años, todos tenemos que hacernos cargo del equipo y asumir las responsabilidades que nos tocan.
-También estás colaborando con las categorías formativas, como profesor de los más chicos, ¿cómo sentís ese rol?
-Es algo que a mí siempre me gustó hacer y me gustaría el día de mañana ser entrenador de básquet. Siento que puedo, que estoy capacitado para eso y así como mis entrenadores de mas chiquito me guiaron mucho, me gustaría hacer lo mismo con la siguiente generación.
-Se viene el clásico con Estudiantil Porteño, ¿cómo te estás preparando?
-Es un partido muy lindo, que estamos esperando desde hace mucho tiempo. Es un partido que desde que comenzó el año estamos pensando y, digamos lo que digamos, es un partido que queremos ganar, asi que esta semana hicimos muy buenos entrenamientos. Nos preparamos muy fuerte para el clásico y va a haber que demostrar las cosas en la cancha. Es ganar o ganar! Los clásicos no se juegan, los clásicos se ganan!
Texto: Carolina Brito
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| Facundo Kaneshiro quiere seguir sumando experiencia. |
-¿Qué sentiste en tu partido debut en Primera en esta temporada como local?
-Me sentí muy a gusto en la cancha y con mis compañeros, fue una linda experiencia porque estar acá desde los cuatro años, desde chiquito. Era Mini y venía a ver a los jugadores de Primera y ahora que me toque a mi estar del otro lado, vistiendo los colores de Ramos es todo un orgullo, y que me haya ido bien para mí es una gran felicidad.
-Ante Argentino de Castelar, además de ser la figura, hiciste una jugada muy especial que se comentó en las tribunas, incluso por los hinchas rivales. ¿Cómo fue ese momento?
-Fue muy lindo, sentí que estaba haciendo una buena jugada. Se escuchaba un murmullo en la tribuna y ver que me salió bien es muy lindo la verdad. Se sintió muy bien.
-¿Cómo llegaste al club, cómo fueron tus comienzos y tus primeros pasos en el básquet?
-Bueno, yo venía al jardín acá al lado y hacía natación desde chiquito acá en el club. Un día con mi abuelo, que siempre me pasaba a buscar, subimos al gimnasio de básquet. El jugaba al básquet y también jugó al fútbol profesionalmente, y me dijo si quería probar. Le dije que sí, y desde los cuatro años que se convirtió en mi vida, el básquet es todo. Y así, gracias a mi abuelo empecé a jugar al básquet.
Kaneshiro, además de jugar en la categoría U19, entrena con la Primera División desde el año pasado, cuando era cadete (U17) de segundo año.
-¿Cómo te sentís en los entrenamientos?
-La verdad que me siento muy cómodo. Los jugadores de Primera siempre intentan ayudar a los más chiquitos, a los que son de inferiores intentan dar una mano. Hay cosas que te las da la experiencia y capaz vos no la tenés y que te ayuden está muy bueno. Los entrenadores nos están dando mucha confianza a los jugadores chicos, porque nosotros al tener un plantel muy bajo de edad, promedio 20 -21 años, todos tenemos que hacernos cargo del equipo y asumir las responsabilidades que nos tocan.
-También estás colaborando con las categorías formativas, como profesor de los más chicos, ¿cómo sentís ese rol?
-Es algo que a mí siempre me gustó hacer y me gustaría el día de mañana ser entrenador de básquet. Siento que puedo, que estoy capacitado para eso y así como mis entrenadores de mas chiquito me guiaron mucho, me gustaría hacer lo mismo con la siguiente generación.
-Se viene el clásico con Estudiantil Porteño, ¿cómo te estás preparando?
-Es un partido muy lindo, que estamos esperando desde hace mucho tiempo. Es un partido que desde que comenzó el año estamos pensando y, digamos lo que digamos, es un partido que queremos ganar, asi que esta semana hicimos muy buenos entrenamientos. Nos preparamos muy fuerte para el clásico y va a haber que demostrar las cosas en la cancha. Es ganar o ganar! Los clásicos no se juegan, los clásicos se ganan!
Texto: Carolina Brito
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